DE OTRO SIGLO...

Cierro los ojos por un instante
y la rabia que me produce al abrirlos
y verme plantada en el mismo sitio
me sobrepasa el ALMA.

Nada exterior condiciona mi aullada huida,
mas que yo misma
y aunque repudie sentirlo,
lo necesito,
me alimento de mi propio exterminio
para seguir siendo " yo"...

Me apetece tanto tomar
uno de esos coñac de mi siglo,
embriagarme hasta el desplome.

Tengo ganas de enredarme de mi propia furia,
de gritar a puro silencio,
tengo ganas de vomitar todo mis besos sudados,
tengo ganas de no soñar que vivo,
no es renunciar ,
no es creerse,
y sin embargo es un indiviso adulterio
de mi misma.

No tengo ganas de asomarme a la ventana
para no saltar,
porque lo que mis ojos miran
no lo reconozco,
escombros con latidos mecánicos
de espectáculo anodino y mediocre.

Tengo ganas...

Tengo ganas de inventarme una nueva verdad,
de reemplazar mordiscos sin hambre,
tengo ganas de volver...
levantarme de este cuerpo que me ata,
elevarme de él como ahora,
sin limite de la única piel en esencia,
cerrándome de puertas abiertas.

Y dejar ser,
para ser,
solo ser...


ALMA