Durmiente recuerdo clavado,
montaña traidora que se distancia,
acerco mi lengua a tus labios
posando mi veneno de espinas,
aleteo moribundo de tu boca,
aroma que se expande por tu cuerpo.
te acaricio...
te persigo...
me aferro...
te vengas y me pierdo,
inocente entrega humedecida
que me embriaga los sentidos,
gemidos sin escucha
con mordaza de consentida táctica,
intermitente latir suspendido...
Ígneo pretexto de mi existir...
ALMA
Morir sólo en tus labios deseo y probar tu saliva que es como un veneno y secar tu sudor con mis poros para acelerar mi pronta partida.
ResponderEliminarsaludos conversos.
Alma, destino de fuego tiene la vida...
ResponderEliminarArde el deseo en los cuerpos como la tarde en el cielo, como ese amor en mis sueños.
Alma, destino de fuego tiene la vida...
ResponderEliminarArde el deseo en los cuerpos como la tarde en el cielo, como ese amor en mis sueños.
La mayoría de las veces por desgracia el amor trae dolor...y el dolor trae...amor.
ResponderEliminarUn abrazo...eterno de...Pascual.